Muchas organizaciones que implementan programas de Prevención y Lucha contra el Extremismo Violento identifican a la gente joven como uno de los grupos meta fundamentales para sus actividades. Este foco centrado en la juventud es comprensible, ya que muchos países, especialmente países desarrollados donde pueden existir organizaciones de extremismo violento, albergan grandes poblaciones jóvenes que pueden ser vulnerables a la radicalización. Los y las jóvenes suelen ser los participantes más visibles en los grupos violentos o extremistas. Al mismo tiempo, la investigación y las experiencias de la implementación acumuladas han demostrado que solamente un pequeño número de jóvenes, que son vulnerables al EV, pasan a la acción violenta. La mayoría de los jóvenes no solamente se resisten a esas amenazas, sino que además desempeñan una labor activa y esencial en la construcción de la paz en sus comunidades.
La «juventud» no es solo un rango de edad prefijado, y los gobiernos, organizaciones y el mundo académico pueden definir este grupo de edad «joven» de formas diferentes, dependiendo de sus contextos, necesidades o requisitos específicos. Por lo tanto, el término juventud se comprende mejor como una etapa de la vida, un periodo durante el cual los individuos pasan de la infancia a la edad adulta. Así pues, existen dos ideas que deben tenerse en cuenta a la hora de desarrollar un proyecto que implique a los jóvenes:
Los proyectos y las actividades de la Prevención y Lucha contra el Extremismo Violento que implican a jóvenes deben diseñarse en base a una comprensión de cada etapa de desarrollo, y proyectarse para favorecer los intereses y las capacidades de los y las jóvenes. Las cuatro etapas de desarrollo de los/las jóvenes identificadas en el protocolo citado sobre Jóvenes en Desarrollo de USAID, son: (1) Adolescencia temprana: 10–14 años. (2) Adolescencia: 15-19 años. (3) Edad adulta incipiente: 20–24 años, y (4) la Transición a la edad adulta: 25-29 años. Los Anexos A y B de este protocolo ofrecen una descripción de las principales características de desarrollo de cada etapa, y los tipos de programación y estrategias de implementación que podrían ser más efectivas en cada etapa.
El Desarrollo Positivo Adolescente es un planteamiento de desarrollo para la juventud que se basa en incrementar los juveniles activos y fortalecer los factores de protección. El desarrollo juvenil positivo se basa en la creencia de que «construir la competencia intelectual, física, social y emocional de los y las jóvenes es una estrategia de desarrollo más efectiva que una que se centre exclusivamente en corregir problemas».
A pesar de que existen varios modelos que impulsan el desarrollo juvenil positivo, nos concentraremos en el modelo desarrollado por YouthPower Learning para USAID. YouthPower se desarrolla sobre modelos e investigación previos, además de las consultas con USAID y con otras organizaciones. Para saber más sobre el modelo YouthPower de desarrollo juvenil positivo, consulte YouthPower.org.
Planteamiento de Tres Lentes a la Participación de la Juventud de DFID: Este planteamiento basado en activos analiza la participación a través de tres lentes o ángulos: (1) el trabajo para los y las jóvenes como beneficiarios, (2) la implicación de la gente joven como socios, y (3) el apoyo a los y las jóvenes como líderes.
Marco de valores de desarrollo de Search Institute: Este marco de trabajo define 40 apoyos positivos y fortalezas (activos) que los y las jóvenes necesitan para triunfar. La mitad de los activos se centran en las relaciones y oportunidades que necesitan en sus familias, escuelas y comunidades (activos externos). Los activos restantes se desarrollan en torno a las fortalezas, valores y compromisos socio-emocionales que de los que se nutre la gente joven (activos internos).
¿EN QUÉ SE DIFERENCIA EL DESARROLLO JUVENIL POSITIVO DE LOS PLANTEAMIENTOS CONVENCIONALES PARA EL DESARROLLO JUVENIL?
El área del desarrollo juvenil positivo empezó a desarrollarse en 1990. En ese momento, los y las investigadores empezaron a cambiar sus preguntas en torno al desarrollo juvenil de «¿por qué existe este problema juvenil?», a «¿qué hace que la gente joven prospere o triunfe?» Este cambio radica en un reconocimiento de que la juventud representa un periodo de oportunidad cuando los y las jóvenes también están abiertos a las ideas positivas, comportamientos, hábitos y riesgos, y son capaces de contribuir y participar activamente en su propio desarrollo y en el de sus comunidades.
| Enfoque convencional del desarrollo de los jóvenes |
 |
Enfoque PYD |
|---|---|---|
| Centrarse en un solo sector para prevenir comportamientos negativos | Centrarse en las etapas y necesidades del desarrollo | |
| Centrarse en el individuo | Centrarse en el individuo, así como en la familia, los compañeros, la comunidad y el entorno | |
| Necesidades de desarrollo y competencias ignoradas | Incluyan la promoción y la prevención | |
| Centrarse en los problemas de los jóvenes y en la prevención de problemas | Céntrense en la creación de activos y competencias y fomentar los resultados positivos | |
| La juventud como beneficiaria/receptor | Impliquen a los jóvenes como actores y participantes activos | |
| Los jóvenes (de alto riesgo o líderes) son el objetivo de los profesionales | La juventud trabaja con la comunidad, como parte de la comunidad; creando oportunidades para todos los jóvenes. | |
| Los jóvenes son receptores de servicios y programas | Los jóvenes como recursos y socios que pueden hacer valiosas contribuciones en la planificación y ejecución de las actividades | |
| Programas reactivos y puntuales | Respuesta comunitaria, sostenible y proactiva | |
| El desarrollo de los jóvenes es una tarea para los profesionales | El desarrollo de los jóvenes es una tarea de todos los miembros de la comunidad |
En general, el planteamiento del desarrollo juvenil positivo ha sido efectivo a la hora de implicar a los y las jóvenes en los programas, especialmente ya que los programas de desarrollo juvenil positivo han alcanzado o contribuido a conseguir resultados positivos a lo largo de diferentes sectores, que incluyen:
- Prevención de la delincuencia y la violencia
- Retraso de la actividad sexual
- Incremento de las habilidades blandas/ académicas
- Aumento del compromiso de la comunidad
- Prevención del abuso de sustancias
- Mejora de las relaciones
Mientras que el planteamiento de desarrollo juvenil positivo se utiliza para alcanzar un objetivo o resultado importante (como la prevención de la delincuencia), también puede derivar en otros resultados juveniles importantes, que pueden no haberse perseguido inicialmente, o que se consideraban «secundarios». Por ejemplo: los programas de prevención de la delincuencia que utilizan el planteamiento del desarrollo juvenil positivo pueden afectar positivamente, tanto a la mejora de las destrezas académicas, como al retraso de la actividad sexual. Este efecto impacta de manera transversal en los géneros o en los grupos étnicos.
Por otro lado, los estudios y la programación de Prevención y Lucha contra el Extremismo Violento han resaltado la importancia de implicar a los y las jóvenes como «actores del cambio», capitalizando los activos y el potencial de los y las jóvenes, promoviendo un sentido de la pertenencia y ofreciendo oportunidades para que realicen una contribución positiva a la comunidad, apoyando el liderazgo y la participación juvenil, y construyendo sus habilidades y competencias. Todos estos factores son bloques de construcción clave en un planteamiento de desarrollo juvenil positivo.
El marco de trabajo del desarrollo juvenil positivo de USAID se construye sobre un conjunto de dominios (temas centrales), y sus características correspondientes (componentes específicos en los que se podría basar un programa o actividad). Encontrará ejemplos de las actividades de los programas de desarrollo juvenil positivo alineadas con las características del desarrollo juvenil positivo y conectadas a un Modelo Socio-Económico, en este documento.
CONSEJO DE APLICACIÓN: ORIENTACIÓN PARA INCLUIR A LOS JÓVENES EN EL CICLO DE PROYECTOS DE P/CVE
Mientras, piensen en cómo ha involucrado o puede empezar a involucrar a los jóvenes a lo largo de las diferentes fases de su proyecto - Valoración, Diseño, Ejecución, Seguimiento y Evaluación, y Aprendizaje - eche un vistazo a esta nota orientativa sobre los diferentes niveles de participación y sus implicaciones, así como a algunas preguntas orientativas a tener en cuenta a la hora de involucrar a los jóvenes en el ciclo del proyecto de P/CVE.